miércoles, marzo 09, 2011

Piscis

La verdad, no me alcanza. Anoche me di cuenta que cuando nuestra vida se vuelve un caos en medio de la mas exquisita tranquilidad y confort, es tiempo de recordar, de volverse para adentro. Inmediatamente aparece la pregunta ¿Qué hago aqui? digo aqui existencia, no lugar.
Estanque, eso es! estanque es la palabra. El momento en que todo lo que uno piensa es recurrente. El lugar donde el pensamiento no alcanza.
Hay más ¿Pero qué? ¿Qué más? ¿Quién más? No sé, por eso pregunto, por eso es «estanco», como en un estanque, el agua está ahí toda y sin embargo nada más. Estanque.
Busco el río, prefiero el río. Es una metáfora palpable la del agua que fluye. Eso busco, las manos que se mojan con la corriente sin poder atrapar nada, sin volver a tocar la misma agua.
Busco un «no en vano».
El movimiento acertado.
El amor en el movimiento.
La calidad de las acciones.
El tiempo comprometido.
La sensación de ir.
Eso busco.

Cuando lo hago lo encuentro, me siento bien, en lo cierto. Pero sólo cuando voy allí, a ese lugar tan cercano y tan lejano, el de uno mismo. Sólo cuando entro en contacto con el mundo y los demás en el más mínimo detalle, en el más mínimo tiempo. Entonces, ya no soy estanco, soy río, soy río y pez, soy Piscis.